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En el año 2015 el árbitro Jesús Tomillero, que dirigía de forma profesional en España, decidió dar un paso al frente y admitir públicamente que es homosexual. Esto, que no debería generar gran escándalo, choca en algunos sectores de la sociedad actual y el fútbol no fue la excepción. La decisión le debe haber dado mucha tranquilidad pero también le generó problemas, dado que los hinchas lo trataron mal y decidió dejar de ejercer el arbitraje.
Los insultos, maltratos e incluso amenazas de muerte hicieron que a mediados de 2016 decidiera dejar el arbitraje de forma profesional. Barcelona está realizando algunas acciones para promover la tolerancia y una de ellas fue en contra de la discriminación sexual. Tomillero fue invitado al Camp Nou a ver el partido entre Barcelona y Granada y fue recibido por Andrés Iniesta, que no pudo jugar por lesión.
Tomillero agradeció el gesto y además declaró que tuvo una charla particular con el “Cerebro”. Le preguntó por que creía que en el fútbol no se conocían muchos casos de jugadores que revelen que son homosexuales y la respuesta de Iniesta lo dejó pensando: “Iniesta me dijo que es normal que los jugadores no salgan del armario. ‘Mira lo que te pasa a ti, imagínate lo que nos pasaría a nosotros’”, dijo. Dejó en claro que en el fútbol, al igual que en la sociedad, queda mucho por recorrer.
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