El rincón de las arañas
Prof. Hermes J. Sanabria
Póngase en el lugar de aquellos hinchas de selecciones que tienen que pasar por un repechaje para clasificar al Mundial. No es tan difícil, hasta hace poco lo hacíamos siempre. Los nervios se ponían a prueba, el sufrimiento estaba siempre a flor de piel y la calculadora en la mano. ¿Cuándo se concibió una selección uruguaya sin tensión, aún en la victoria? Esto fue así, siempre fue así, Está en nuestro ADN, o al menos estaba.
Porque de un tiempo a esta parte, hay un equipo nacional que ha llegado para cambiar el paradigma, para ayudar a dejar de lado todos aquellos sentimientos que nos ponían más nerviosos que de costumbre y nos llevaban a llenar las consultas de profesionales de la salud mental. Sí, incluso por el fútbol los uruguayos nos poníamos ansiosos y alterados. Y decimos “poníamos”, porque pareciera que estos muchachos encabezados por Tabárez, hacen todo lo posible por lograr que el pueblo tenga un motivo menos por el que angustiarse.
Una clasificación calma y lograda de forma directa, pese a algunos momentos de duda. Amistosos en ciudades emblemáticas de Europa, utilizados de forma armónica como preparación para la cita mundialista, citados todos los jugadores que la gente pide (a excepción de Lucas Torreira) y con un nuevo estilo de posesión de balón que pone un manto de tranquilidad sobre propios y extraños. Ni siquiera hay tiempo para la clásica recuperación contrarreloj de Luis Suárez, porque no hay urgencias. Todo es en calma, hasta con espacio para el disfrute, ese elemento tan poco habitual en nosotros.
Ojo, ya se alzan voces que reclaman la vuelta al estilo de siempre, ese en el que el mediocampo es apenas una zona por la que la pelota no pasa. Es que, con estos chiquilines nuevos, se trata tan bien al esférico que algunos extrañan quejarse de que los volantes no dan dos pases seguidos. Otros se quejan de que el estilo de Uruguay es aburrido, pero es normal, ya que, así como ayudan a conseguir el equilibrio nervioso y emocional tan necesario en la vida actual, a veces los ansiolíticos dan sueño.
Este ansiolítico celeste se compone 100% por ingredientes naturales creados en nuestro país y potenciados en las mejores ligas del exterior. Por eso, esté tranquilo de que los cambios son saludables, sin efectos secundarios y de eficacia demostrada. Como decía el colega Yanuzzi, “no se coma la pastilla”. Esta selección es el mejor remedio contra la típica ansiedad uruguaya.
el rincón de las arañas, Mundial, Profesor Hermes J. Sanabria, Repechaje, Rusia 2018, uruguay