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No es la primera vez que un futbolista o un grupo de futbolistas celebra en un sorteo. Algunos lo hacen porque le tocan equipos relativamente sencillos y otros porque van a tener la oportunidad de enfrentar a potencias a nivel de clubes.
La Copa Libertadores y la Copa Sudamericana generan esas cosas en los planteles y sino que le pregunten al argentino Martín Prost que juega en el Nacional de Potosí.
¿Cuál fue el motivo de su alegría? Poder ir a jugar a La Bombonera ya que el equipo del altiplano será rival de Boca Juniors en el segundo torneo más importante a nivel de clubes de nuestro continente.