El rincón de las arañas
Se viene la Navidad; y entre regalos, sidra y pan dulce, los equipos uruguayos ya conocen a sus rivales para la Copa Libertadores 2017 luego de un emotivo sorteo que se pudo seguir por televisión.
Tanto a Peñarol como a Nacional, les tocó un equipo brasileño y uno con nombre de persona. Mientras que al aurinegro le cayó en suerte el campeón del país norteño, los tricolores serán rivales de un Chapecoense que se levanta después de la tragedia, pero podemos afirmar que sin el concurso de Riquelme ni de Ronaldinho, y mucho menos con la donación de 3 millones de euros de Cristiano Ronaldo. No hay que creer todo lo que se lee en las redes sociales, a veces tampoco en la prensa.
De Zulia, rival del conjunto albo, y Jorge Wilstermann, contrincante del carbonero, no sabemos demasiado. Nos gusta el fútbol, pero tampoco la pavada. ¿O acaso usted conoce los planteles completos y los sistemas tácticos de estos pintorescos equipos? Creemos que, si nuestros grandes no pueden, con todo respeto, tirarle la camiseta encima a estos débiles representativos, tendrán bien ganadas las burlas de los hinchas adversarios y ante una eventual derrota darán pie a los más jocosos títulos por parte de nosotros los obreros de la palabra. Por ejemplo, “¡Como le gusta el baile, al hijo de Zulia!”, parafraseando al finado Pocho la Pantera en caso de una derrota tricolor ante el humilde conjunto venezolano; o “Peñarol ahora tiene apellido”, simbolizando una hipotética paternidad del Wilstermann sobre los aurinegros.
Cerro y Wanderers enfrentan una nueva participación de maneras muy distintas. Ambos deberán sortear fases previas, pero el caso de los bohemios se antoja un tanto más intrincado. Al final de esas fases previas, de llegar los dos se enfrentarían entre sí. Cerro se cruza con Unión Española de Chile. Su jugador más conocido es el rubio Palermo, ex Boca Juniors (hoy DT). De ganar se enfrenta a Wanderers y ahí el que gane pasa a integrar un grupo. Pero para el equipo del Prado, la cosa es mucho peor. Deberá sortear dos fases previas, ante equipos bolivianos de la altura. Si supera al The Strongest a 2800 metros, lo espera el Bolívar a 3600. Al hincha bohemio que quiera viajar acompañando y supere estas dos paradas sin ayuda de tanque de oxígeno ni respirador, se le hará socio vitalicio en una bonita ceremonia.
Los que vivimos las épocas en las que esta copa se ganaba seguido, no podemos más que esperar con ansias que nuestros equipos estén a la altura de las circunstancias. El resto es palabrería.
Copa Libertadores, el rincón de las arañas, Nacional, Peñarol, Profesor Hermes J. Sanabria