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Mauro Icardi tiene 24 años, pero a pesar de la corta edad ya ha demostrado una gran madurez dentro del campo que lo llevó a ser capitán y goleador de un grande del fútbol mundial como el Inter. Es cierto que la escuadra nerozazurra no pasa un buen momento y eso agranda incluso un poco más la figura de su “9”.
Muchos los quieren a la selección argentina, otros lo rechazan por sus problemas afuera de las canchas, pero lo cierto es que su último “problema” lo tuvo en su cuadro y con algunos de sus compañeros dentro del vestuario.
Es sabido que la función de ser capitán no es sencilla. Por momentos puede ser muy pesada y representa una gran responsabilidad, que al parecer Mauro Icardi tiene muy asumida… pero tal vez la tiene demasiada asumida.
El delantero fue consultado sobre la situación del vestuario y no dudó en responder que “¿Si busco alentar a mis compañeros? Pruebo hablando, dándoles consejos. Pero están los que escuchan y los que no les interesa hacerlo”.
