El rincón de las arañas
Prof. Hermes J. Sanabria
Se dice que lo único constante en la vida es el cambio, aunque en Uruguay podrían ser las quejas, por ejemplo. O el “no se puede”, o hablar del clima en el ascensor. Y también Cristian Palacios haciendo goles en este campeonato. Casi de la misma manera que decíamos que cada vez que vemos las noticias hay un gol de Cavani, el también salteño goleador aurinegro es el hombre del momento en el fútbol uruguayo. Si se cruza a Palacios por la calle, pídale que les toque la cabeza a sus hijos a modo de bendición o que le diga los números del 5 de oro. Un gol cada 34,8 minutos avalan el momento de inspiración de un sacrificado obrero del fútbol, que hoy disfruta del reconocimiento del público por mérito propio.
En una nueva e inusual etapa jugada entre semana, el goleador estuvo otra vez iluminado. De forma más constante que el Franzini, para ser gráficos. Y uno, como hombre de fútbol, no puede dejar de alegrarse por un muchacho que tiene pinta de bueno y de eso que saben esperar su momento. ¿Alguien le escuchó la voz a Palacios alguna vez? Sin tatuajes, sin cortes de pelo extraños, sin controversia, él hace goles con la misma frecuencia con la que se juegan partidos.
Entre tanto partido, casi no da tiempo a recuperar el bolsillo los espectadores ni las piernas de los jugadores. Pero hay una constante, Palacios y su sed de gol. Algunos hasta lo piden para la selección, acecha el récord de Fernando Morena, juega recién su segundo partido de titular y tiene el número 30, muy alejado del número 9 de los grandes goleadores. Todo eso pasa mientras el hombre que más sabe de aquello de irse a préstamo, va por el campeonato con la confianza del que sabe que nunca más le dirán “goleador de cuadro chico”.
El tercer salteño más famoso (porque Pablo Cuevas nació en Argentina) está a punto de propiciar una investigación académica sobre las propiedades de las naranjas de Salto en el rendimiento deportivo, mientras los responsables de haber traído a Peñarol al argentino Toledo o al paraguayo Ávalos se rasgan las vestiduras diciendo que siempre lo quisieron. No hay caso, se ve que es difícil ser profeta en propia tierra. Y en Central Español, Atlético Tucumán, El Tanque Sisley, Olmedo de Ecuador, Juventud de Las Piedras, Temperley de Argentina o en Wanderers…
Cristian Palacios, el rincón de las arañas, Peñarol, Profesor Hermes J. Sanabria
