El rincón de las arañas
Prof. Hermes J. Sanabria
“En cualquier tarea se puede ganar o perder, lo importante es la nobleza de los recursos utilizados”, dijo alguna vez Marcelo Bielsa y conquistó los corazones de millones de adeptos a su singular filosofía. Recursos, justamente, es lo que le sobra al respetado colega argentino. También nobleza, porque seamos claros, no se van a andar espantando el resto de los entrenadores porque alguien mande a un asistente a ver la práctica de un rival para sacar algunas conclusiones.
Esto se hace desde que el fútbol es fútbol, por eso sorprendió la acalorada crítica de Frank Lampard por dos razones: una, por ser también entrenador y dos, por ser inglés. Hablamos de un país que no practicó justamente la nobleza para apoderarse de los recursos de otros países. También hablamos de un país que hizo de un espía uno de los más célebres personajes de la historia del celuloide. ¿Se van a espantar porque un estudioso del fútbol haga lo que se conoce como “scouting”? ¿En qué idioma está dicha palabra?
“Cree el ladrón que son todos de su condición”, reza un famoso refrán. Esto fue lo que movilizó de tal manera a los ingleses, poniendo sobre la mesa toda la maquinaria para manchar la reputación de Bielsa. Por ejemplo, desde sus respetables tabloides, conocidos por ejercer todo tipo de amarillismo y violaciones de la confidencialidad. ¿Se acuerda de la forma en la que juzgaron a Suárez?
Uno vivió mucho tiempo en la querida Argentina, por eso conoce de sobra cómo son estos ingleses. Hacen películas de espías, pero se rasgan las vestiduras porque un entrenador de fútbol está haciendo su trabajo. ¿Qué sigue? ¿Que se espanten por la piratería en internet? Una cosa es innegable: si en Uruguay somos 3 millones de directores técnicos, en Inglaterra son 55 millones de jueces de la moral ajena. ¡Que no nos vengan a contar ninguna de espías!
Espionaje, Frank Lampard, Inglaterra, Marcelo Bielsa, Prof. Hermes J. Sanabria