El rincón de las arañas
Prof. Hermes J. Sanabria
Pasó más rápido que las vacaciones, pero bien dicen que lo breve y bueno es dos veces bueno. Lo lindo de todo esto, es haberlo vivido para poderlo contar. El entrenador de Central estaba repartiendo los chalecos para el fútbol informal, y al llegar a la ofensiva: “Loco vas vos arriba con…”. “¿Cómo que el loco se fue?”, dicen que se escuchó hasta en el Méndez Piana. Como esos amores de verano, el paso del Loco por Central fue efímero. El Rangers de Talca chileno será privilegiado por ser el club donde va a igualar el Récord Guinness, pero a su vez sabe que no va a poder contar con él para un proyecto a largo plazo, no tanto por su edad, sino porque cualquiera sabe que va a ir en breve por ese club número 26.
Hay que disfrutar el momento, dicen muchos hoy en día. Ya el Loco había avisado que iba a ser flor de un día o dos. Y el que avisa, no es traidor; cantaba Pablito Estramín. Tras su presentación en Central, el delantero ya había dejado abierta la puerta para volver a Santa Tecla de El Salvador donde se juntaría con Carlos Bueno para compartir la delantera. Pero todo el mundo sabía que, si iba por el récord, no iba a repetir club (cabe recordar que el alemán que ostenta la marca, vistió 25 camisetas distintas). Por eso lo de Chile.
Hay otro detalle: en el registro del hombre récord, sobresale el hecho de ser el único jugador que ha actuado en las seis confederaciones de la FIFA. Esto es, Abreu le va a batir el récord al alemán, pero no se va a quedar conforme si no juega en las todas las confederaciones. Luego del Rangers, ¿Tratará de meter un enroque Asia-África-Oceanía? Tendría que hacer un contrato de similar duración al de Forlán en la India, pasar por alguna liguilla en África y unos playoffs en la ascendente liga australiana, para gastar su último cartucho cerca de los afectos y en un proceso a largo plazo (6 meses, de acuerdo a sus estándares actuales) en algún club de nuestro medio. No lo subestime, cuando al Loco se le pone algo en la cabeza, no para. Por eso, no se sorprenda si en los próximos meses escucha este tipo de declaraciones de parte del minuano:
– “Al fútbol de la India lo tengo bien considerado, y sé que están apuntando al protagonismo, con alto nivel de competitividad y aspiran a cosas importantes trayendo figuras de peso como mi compatriota y amigo Diego Forlán”.
– “Desde que le piqué el penal a Ghana, tenía una cuenta pendiente con el fútbol africano, y acá estoy para eso y para seguir aprendiendo”.
– “Hablé varias veces con Mark Viduka, contra quien jugué el repechaje en el 2001, y es una gran oportunidad de incursionar en un fútbol en crecimiento. El Tuna Fornaroli también me habló muy bien de esta liga”.
Y allá irá Abreu, convencido de que lo único constante en esta vida, es el cambio.
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