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Menos mal que el partido ya estaba sentenciado y que Francia ya estaba clasificado, pero lo cierto es que podría haber sido peor la confusión para el público, los jugadores y hasta parte del cuerpo técnico.
Sobre el cierre del choque donde los galos golearon 8-0 a Kazajistán se vivió una situación insólita con un hincha y un silbato. No será la primera ni la última, pero sin duda esta fue distinta.