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Fue una de las jugadas más polémicas de la final de la Copa Libertadores. El gol parecía inevitable cuando Gabriel Barbosa quedó frente al arco con dos jugadores prácticamente en la línea de gol. El remate salió de su pie y rebotó en un jugador de River y ¿después?
Todo hacía indicar que había mano, pero el VAR finalmente confirmó que la misma no era intencional. Así lo vieron los árbitros y esta fue la interpretación que llevó a que no se cobre la pena máxima a favor de Flamengo.
Copa Libertadores, Flamengo, River Plate