El rincón de las arañas
En ningún fútbol del mundo se da que una fecha de una liga homenajee a uno de sus equipos participantes. El Uruguayo Especial nos regala la fecha “77 aniversario de Boston River”, y no podemos más que sentir orgullo por tener el privilegio de contarle a usted las alternativas de este torneo.
Poco se sabe de la institución debutante en primera, además de que antes de pisar la cancha ya estaba marcándola con su voto a favor de Puma, y que en el arco tiene a un histórico como Adrián Berbia. Otro emblema, como Leonel Pilipauskas, abandonó la práctica activa luego de cumplir el objetivo de llevar prácticamente solo al Boston a Primera. Ya en el círculo de privilegio, son historia conocida sus cinco goles al otro River, el de JR.
¿Qué mejor homenaje para el benjamín de la divisional, que celebrar su fecha homenaje en el máximo escenario? Por esta vez, el “Viejo Boston” cambia su localía en Flores para hacerle sentir a Peñarol el rigor de ser visitante en el Monumento al Fútbol Mundial, escenario en el que además juega por primera vez en su historia. Para poner justicia en una fiesta de tal magnitud, no podía ser el elegido otro que Leo Dan González, hombre destinado al estrellato desde que sus padres lo bautizaron. Por si fuera poco, el partido tiene otro condimento, como la chance de que se cumpla la tan en boga “ley del ex”. Resulta que Cepellini y Federico Rodríguez, los ex Bella Vista que una vez pasaron a Peñarol y se fueron a los dos dias sin siquiera haber entrenado, aparentemente calificarían para tal axioma que tanto gusta a los colegas más jóvenes.
Pero hoy queremos quebrar una lanza por nuestro país, porque cuando tanto se habla de que no nos ponemos de acuerdo en las cosas más básicas, ambos clubes llegan a un acuerdo de una forma tan armónica que hace parecer a un matrimonio con 50 años de casados como un plantel dividido. ¿Cómo fue más o menos la cosa? Boston River necesita divisas, teme que el partido ante Peñarol dé pérdida por el mal momento aurinegro, Peñarol se compromete a pagar si no se cubren los costos, juega donde se siente más cómodo (por aquello de que no le viene agarrando la mano al CDS).
En resumen, ambos jugarán donde quieren, sin necesidad de controversia alguna. Si hay déficit, los aurinegros absorberán la diferencia de dinero. En caso de ganancia, irá 100% para Boston River. Peñarol demuestra ser una institución altruista y sin fines de lucro, que solo busca alcanzar un objetivo deportivo y ayudar a un cuadro amigo. Que sea una fiesta.
Boston River, Campeonato Uruguayo Especial, el rincón de las arañas, Profesor Hermes J. Sanabria