El rincón de las arañas
Por esas vueltas de la vida y de la pelota, quiso el destino que 80 años después de la trágica muerte del Mago Carlos Gardel, sea el fútbol el escenario del surgimiento de un crack al que se disputan uruguayos y argentinos, pero nació en Francia y su presencia en nuestro país opacó a la boda del año (que para más datos era la del capitán de la selección uruguaya de fútbol).
De golpe, todos quisimos saber qué hacía, qué lugares elegía visitar, con quiénes comía un asado, qué traje se iba a poner para la ceremonia… Y eso que el hombre nos hizo un gol que ayudó a eliminarnos de un mundial. Pero si algo nos gusta a los uruguayos, es que nos digan lo lindos que somos. Eso opaca todo.
Cada gol, cada festejo, cada grito en perfecto castellano, cada foto tomando mate, y cada tweet alentando a Uruguay hace que nuestro pueblo quiera cada vez más a Griezmann. Fíjese usted, que la popularidad de Antoine en nuestro país es tal, que no son pocos los compatriotas que han adaptado el famoso “jingle” de Alberto Kesman a un pegadizo “Griezmann es Griezmannnnn, en esto del fútbollll…”. Y es que los uruguayos somos así, románticos, idealistas, y nos encariñamos enseguida cuando nos guiñan un ojo.
Mientras esperamos que venga a radicarse a nuestro país una vez retirado del fútbol, seguiremos la pista de todo lo que hace el francés más uruguayo. Así como una vez le tiramos una bandera uruguaya en plena conferencia de prensa post título del mundo, lo seguiremos abrazando. Porque nadie abraza las cosas más fuerte que un uruguayo.
el rincón de las arañas, Godín, Griezmann Uruguay, Prof. Hermes J. Sanabria